La reunión de conjunta de Legislación y Transporte estaba prevista para las 15. Pero fue suspendida a último momento. Incertidumbre en el oficialismo.
El llamado de las relatoras a los concejales tenía una sola consigna: hacerles saber que se había suspendido la reunión conjunta de las comisiones de Legislación y Transporte para tratar el aumento del boleto. Las razones, que no transmitieron en aquel mensaje, son estrictamente políticas: el oficialismo no consigue los votos para aprobar el incremento.
El día y la hora habían sido propuestos el lunes, después de otra reunión frustrada luego de que el jueves pasado el expediente para subir la tarifa plana del transporte un 17,3% (de $9,85 a $ 11,56) volviera a comisiones. El retroceso obedeció a un cuestionamiento de la oficialista Angélica González (Coalición Cívica) sobre las tercerizaciones. “Por una razón moral no podemos firmar algo que no es claro”, argumentó entonces.
Esas declaraciones de González causaron malestar en el resto del interbloque Cambiemos. Es que sus concejales ya habían respaldado en comisiones (antes de que el expediente regresara a ellas) el estudio de costos del Ejecutivo para que el boleto aumentara.
La postura de González complica los planes del oficialismo, que tiene 13 votos y, sin el de la concejal, no alcanzaría una mayoría absoluta. Sólo podría llegar a 12 y hacer valer el voto doble de la presidencia, pero es una alternativa que algunos en Cambiemos no quieren explorar por temor a que el tema se judicialice.
Sucede que el aumento de boleto de diciembre de 2016 tuvo un cuestionamiento del juez Marcelo Fernández porque lo votaron 12 ediles. Y si bien en la causa no hay sentencia firme, la mera posibilidad de una presentación judicial atemoriza a ciertos miembros del interbloque.
Estas dificultades para obtener los votos tienen como telón de fondo la siempre presente amenaza de medidas de fuerza por parte de la UTA, que recordó que un porcentaje del aumento de sueldo de los choferes está sujeto al incremento tarifario. El viernes pasado, el gremio había convocado a un paro nocturno, pero luego lo morigeró a la espera de que prosperaran las negociaciones.
El dilema de Cambiemos es cómo conseguir 13 votos, con una González que ya puso su moral en juego y una oposición que adelantó su voto en contra. Otra opción que se recordaba este martes en los pasillos del Concejo era la de otorgarle al intendente la facultad de fijar el aumento. Una diagonal que en el Ejecutivo, por ahora, no están dispuestos a aceptar.
Mientras el oficialismo le busca una salida a la encerrona, los transportistas ya pidieron un nuevo aumento: quieren un boleto a $ 14,77.